Volvemos con otro de los fondos más seguidos en Twitter, en esta ocasión tenemos con nosotros a JuanMa Rodríguez, co-fundador del fondo Impassive Wealth.
Los que ya seguís está sección ya sabréis que hablaremos un poco de todo: cómo surge la idea, éxitos y fracasos, filosofía de inversion con la que más se identifica y que opinion tiene para lo que queda de 2019 y el proximo año.
Muchas gracias por tu tiempo y por compartir tus experiencias con nosotros JuanMa, es un placer poder charlar contigo de inversion, economía, bolsa y otras tantas cosas, arrancamos….
- Háblanos sobre ti. ¿Quién es JuanMa Rodríguez? Estudios, trayectoria, a que te dedicas.
Hola Iván, me gustaría antes de nada agradecer tu amable invitación para contar un poco sobre mí y sobre Impassive Wealth en este magnífico blog.
Soy arquitecto, especialista en el cálculo de estructuras. En la década de los 2000 tenía una empresa que servía a otros arquitectos y a compañías constructoras. Desgraciadamente tuvimos que cerrar en 2010 debido a la crisis del sector inmobiliario. Desde entonces he seguido trabajando como arquitecto (autónomo), compaginando ese trabajo con el estudio y la investigación en el ámbito de las inversiones.
Cursé el Máster Value Investing y Teoría del Ciclo de OMMA en su sexta edición (2015-16) donde conocí a Juan R. Cogollos, ingeniero de software que vive en Oxford. Juan y yo somos los socios fundadores de Impassive Wealth Ltd (diciembre de 2015).
En esta época fuimos invirtiendo nuestro propio dinero, el de familiares y el de un grupo de amigos utilizando nuestro método al que denominamos “inversión impasible”. Durante este tiempo el método de inversión fue evolucionando para culminar en la creación de Impassive Wealth FI con la gestora Esfera Capital el 14 de septiembre de 2018.
Ser gestor del fondo representa la culminación de muchos años de trabajo y es por tanto una gran satisfacción haber llegado hasta aquí. A la vez es una gran responsabilidad gestionar casi 8 millones de Euros de 200 partícipes.
- ¿Cómo surgió el interés por la inversión? ¿Con que filosofía te identificas mejor y por qué?
Mi interés surgió por una mezcla de azar y necesidad. La crisis inmobiliaria que comenzó en 2007 me dejó con muy poco trabajo, pero con ciertos ahorros que tenía que rentabilizar de algún modo. Como disponía de tiempo, me puse a aprender e investigar de qué forma podía lograr este objetivo.
Poco a poco llegué a la conclusión de que la inversión tiene que ser sensata y a largo plazo. Descubrí también que los costes de invertir son importantísimos y que es casi imposible invertir con éxito basándose en predicciones. Al menos yo no soy capaz de predecir el futuro. Creo también en la diversificación y en estar invertido en todos los activos deseables a nivel mundial.
Por todo esto utilizo sobre todo fondos y ETFs indexados. Son baratos, cubren una variedad enorme de activos y de geografías, son fácilmente negociables, etc. También se olvida a menudo que las reglas de funcionamiento de un índice constituyen en si mismas una estrategia de inversión.
- ¿Cuál fue tu primera inversión? ¿Cuál fue el resultado?
Mis primeras inversiones fueron allá por 1998. Invertí un millón de pesetas de la época en varios fondos de Caja Madrid, que era mi banco del momento. Se trataba de fondos de muchos tipos, en dólares y en pesetas. Al no tener mucha idea de lo que hacía, a los dos años y algo los vendí con pérdidas “jugosas”. A partir de ahí no quise saber nada de la “maldita” bolsa y me refugié en los depósitos que iban ofreciendo las distintas entidades.
Creo que es una historia típica con la que mucha gente puede identificarse. Recurrir al banco, no saber bien en que se está invirtiendo, perder dinero y concluir que la bolsa es un juego. Nada más lejos de la realidad. Parte de nuestro proyecto consiste en mostrar a la gente de la calle que invertir es mucho más simple, que la bolsa es el mejor activo a largo plazo y que por tanto no hay que tenerle ese miedo fruto de haberse “quemado los dedos”. Nos tomamos la educación financiera muy en serio. Hace mucha falta.
- ¿Tu mayor éxito como inversor? ¿Y fracaso?
He invertido casi siempre a través de fondos de inversión así que no tengo un gran éxito que contar tipo una empresa multibagger ni nada por el estilo. Es más, las pocas veces que he invertido en empresas los resultados han sido bastantes mediocres. Todavía recuerdo una minera que tuve en cartera y acabó quebrando. Perderlo todo en una inversión es un fracaso, no cabe duda, pero enseña muchísimo. Mucho más que leer la noticia en el periódico sin tener las acciones. Los accionistas del Banco Popular saben de lo que hablo.
Mi recomendación al inversor de a pie es que tenga el riesgo muy controlado. ¿Por qué voy a invertir en cinco empresas del Ibex habiendo ETFs de cobertura mundial con miles de empresas? La inmensa mayoría de los inversores particulares deben, en mi opinión, conformarse con una rentabilidad “aceptable” en vez de perseguir una rentabilidad extraordinaria.
- ¿Cómo surge ImpassiveWealth? ¿Por qué? Supongo que el inicio sería difícil y duro, ¿Alguna anécdota?
Impassive Wealth como fondo de inversión no existiría si no se hubiesen dado una serie de circunstancias. Por un lado, conocer a mi socio que vio potencial en el método que yo había inventado. Por otro estar ayudando a otro amigo arquitecto a gestionar sus ahorros. A esta persona la conocemos por el nombre cariñoso de “el impasible cero”. Un buen día el impasible cero me dijo “deberías cobrar por esto” y eso me sugirió que el método podía ser viable como propuesta comercial.
De estos primeros escarceos surgió nuestro Club de Inversión con la incorporación de familiares y amigos, sobre todo compañeros de promoción de OMMA. A estos pioneros les otorgamos el noble título de Impasibles Históricos.
Pero en efecto, sí que hubo una etapa dura donde aspirábamos a tener un vehículo de inversión, pero los posibles socios consultados no lo veían viable con las bajas comisiones que queríamos proponer. ¡No se puede predicar el bajo coste y tener unas comisiones altas! Un buen día contactamos con Esfera Capital que si quiso involucrarse en el proyecto. Y el fondo de inversión se puso en marcha con el capital procedente del Club de Inversión.
Tenemos muchas anécdotas, sí. Por ejemplo, mi socio y yo tuvimos la idea de unir fuerzas de forma casi simultánea. Es más, nuestra siguiente conversación por Skype comenzó de este modo:
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- Me gustaría hablarte de una cosa.
- ¡Ah! Pues yo también tengo que comentarte algo.
Y de ahí surgió Impassive Wealth. Ambos queríamos proponer al otro trabajar juntos.
- Si Impassive Wealth tuviera 10 mandamientos o normas por las que regirse ¿Cuáles serían?
Pues para mi serían todas esas cosas que debe tener presente el inversor particular a la hora de invertir. Estos principios son los que guían la gestión del fondo:
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- Invertir en todos los activos deseables disponibles.
- Diversificación dentro de los activos elegidos.
- Largo plazo. Hay que pensar en 10 años o más.
- Aislarse del ruido del mercado.
- Decisiones automatizadas.
- Protección del capital.
- Expectativa “satisfactoria” y realista de rentabilidad.
- El mejor momento para empezar es ahora.
- Basarse en certezas (precios) y no en conjeturas (predicciones).
- A menudo la mejor decisión es no hacer nada.
Proponemos en esencia una inversión sensata, tranquila y satisfactoria que permita al ahorrador dedicarse a tantas cosas importantes que hay en la vida. No a todo el mundo le apasiona el mundo de la inversión.
- ¿Qué objetivos te marcas con ImpassiveWealth de cara al futuro? ¿Tienes algún otro proyecto financiero en mente?
De momento queremos seguir aumentando el número de partícipes y el capital bajo gestión. Llevamos solamente un año como fondo y debemos ser pacientes. Estamos muy satisfechos con la evolución y esperamos que siga la tendencia.
Queremos conseguir que el fondo llegue a inversores institucionales, pero ahora mismo, por track record, lo vemos complicado. Imaginamos que es más fácil obtener la confianza de institucionales más pequeños tipo Family Office, por ejemplo. Es desde luego un campo a explorar.
También nos gustaría poner el fondo, o uno similar, a disposición de los ahorradores europeos y de otros países. Se puede invertir desde fuera de España ahora mismo, pero hay que abrir una cuenta aquí, en Euros, y eso es un engorro para el inversor internacional. Queremos que la inversión impasible esté disponible en la mayor cantidad de países posible.
También hemos hecho experimentos con una variante de gestión impasible que utiliza apalancamiento. Las rentabilidades posibles son muy interesantes, pero este no podría ser un producto apto para cualquier ahorrador, al ser de más riesgo y más difícil de entender.
- El inicio del 2019 ha estado marcado por fuertes subidas en los mercados, recuperando parte del desastroso final del 2018, y ahora parece que vuelven turbulencias ¿Cómo ves lo que queda de año?
Una parte esencial de la filosofía impasible es no utilizar predicciones, sino precios. Por ese motivo no intentamos ni siquiera tener una visión sobre el futuro inmediato. A finales de 2018 nuestro sistema automatizado nos hizo comprar ciertos activos y curiosamente en 2019 nos hizo vender (con beneficio) exactamente los mismos activos. No somos inmunes al miedo, pero al tener unas reglas que seguir esperamos no tomar decisiones muy equivocadas. Mucha gente se salió en 2018 del mercado y se ha perdido el rebote.
Aun así, si me forzases a contestar, y sólo por diversión, diría por ejemplo que pienso que la renta fija de calidad, tanto de gobiernos como de corporaciones se encuentra en una situación que si no es de burbuja se parece mucho. No entendemos la gracia de invertir con rentabilidades negativas garantizadas. Cierto que en el mercado secundario se está ganando dinero con estos bonos, pero en principio un bono se compra para cobrar unos cupones positivos y recuperar el principal íntegramente. Pero no podría decir si esta posible burbuja va a explotar, ni cuándo.
Es una gran ventaja invertir con un sistema automatizado. Puedes especular y debatir apasionadamente sobre el futuro en tu bar favorito, sin que tus puntos de vista afecten al dinero de tus inversores.
- ¿Cuáles son tus libros de inversión favoritos? ¿Por qué?
Me gusta muchísimo “Los Cuatro Pilares de la Inversión”, de William Bernstein. Tiene partes que son quizás un poco difíciles, pero en general aclara de forma convincente los conceptos esenciales de inversión. Un ejemplo clarísimo es el de los gastos. Afortunadamente el ahorrador se va concienciando poco a poco de su importancia. También aclara por qué es difícil batir al mercado y como retirar dinero de un capital invertido. Muy completo.
También me encanta “The Most Important Thing” de Howard Marks. Muy sencillo de leer, va repasando conceptos fundamentales como los ciclos económicos y la gestión del riesgo.
- ¿Qué consejo le darías a alguien que se inicia como inversor?
Qué repase los mandamientos de la pregunta 6. Que aprenda sobre inversión y cuando tenga una respuesta a sus circunstancias y necesidades que invierta, no antes.
Por ejemplo en www.impassivewealth.com tenemos muchos artículos de educación financiera, la gran mayoría hechos por mi socio Juan, en ellos explica conceptos sencillos como “invertir desde cero”, “la regla del 4%”, etc. Además está haciendo una serie de charlas con gente muy interesante como Amalia Guerrero de Finanzas de casa y Enrique García de InBestia, enlazados a videos de nuestro canal de YouTube.
Realmente hay muchas fuentes de información. Gratuitas. Blogs de mucho nivel, como el tuyo, para gente que empieza y con conceptos más avanzados. Foros excelentes como el de +Dividendos, en Twitter hay gran cantidad de divulgadores financieros españoles, como los dos Marcos, inversobrio y Luque, por poner solo dos ejemplos, pero hay muchos más, se está formando una comunidad de inversores particulares de mucho nivel.
Hay que hacer unos deberes mínimos para dormir a gusto con tus inversiones. En el momento que entiendes en qué quieres invertir y como, simplemente hacerlo. Con un plan siempre porque la improvisación no da buenos resultados. Luego al que le apasione la inversión que profundice, que analice empresas y que llegue todo lo lejos que su afición le lleve. El que no tiene ese interés que elija algo sencillo que le permita dedicarse a otros aspectos de la vida que le interesen más.